Despues de un pequeño parón en las publicaciones del primer trimestre del año, retomamos estos artículos, con la llegada de la primera luna llena de primavera, que da pie para celebrar una nueva Semana Santa.
Ni que decir tiene que ha sido pasada por agua, pues las tormentas; aunque no han impedido las celabraciones, alguna de ellas las hemos tenido que celebrar desde el interior de la parroquia, sin deslucir la ilusión ni el espíritu con que lo hemos echo. Pero si recordar que en muchos años, nunca el tiempo nos impidió hacerlo con procesiones por nuestro pueblo.
Comenzamos con el Domingo de Ramos, saliendo alrededor de la iglesia cantando la entrada de Jesucristo, pero sin burriquita, y bendiciendo los ramos de laurel.
El Jueves Santo celebramos la Santa Cena, ya al finalizar la Misa se traslado del cáliz desde el altar mayor hasta el sagrario de la capilla de la Virgen del Camino. Con mucha devoción y bajo palio, acompañando al párroco en sus rezos, para terminar el acto depositando las velas ante dicha capilla en lo que llamamos la hora Santa y descubriendo de mantel dicho altar.
Llegando así al Domingo de Resurreccción, el día grande de nuestra Semana Santa. Dia que de nuevo amanecio nublado y con lluvia impidiendo asi celebrar la procesión y el encuentro en la plaza. Pero adaptándonos al tiempo comenzamos con la bendición de las aguas en la pila bautismal para que todas aquellas personas que lo deseen pueden llevar a sus casas.
Y siguiendo con el acto del encuentro, Criso frente a Su Madre, alternado las estrofas de los cánticos, aunque no pudimos dar el paso adelante por estar estos sobre las mesas; aún así quedó hermoso y bien interpretado por las cantantes, que con esmero hicieron retumbar sus voces dentro del templo, escoltados por la cruz y los faroles.
Concluido este acto celebramos la Misa de Resurreción, agradeciendo el cura la asistencia, y exortando a continuar con nuestras tradiciones.
Y terminando este breve relato de la Semana Santa 2024, en espera de que el agua caida; al menos sirva para mejorar nuestros campos. No así para restar ilusión ni ánimo en seguir con las actividades que tenemos para este año.
